viernes, 31 de julio de 2020

Quisiera ser

Quisiera ser esa joven, sin su oficio. Andar por donde la gente se abronca y trasmitir la nueva, pues, sin reportajes, de bochinche en bochinche que así se ligarían entre sí. 
Yo haría de Cualquiera, perdóneme, Che Guevara, que los mesías terminaron por caerme mal, usted aparte, desde luego, y Miliano -Zapata, queda entendido- y Luisa Michel, la comunera, y esas mujeres cuyo liderazgo reconocieron las soviéticas y alemanas años 1910 y 1920, por decir, y asiáticas, subsaharianas, afroestadounidenses y latinoamericanas. 
Ya empecé a enlistar, válgame Santa Utopía, y se trataba de presumirles a Alina Duarte y dolerme por no imitarla a mi manera. Lo haría a rastras, casi esclerótico, bien Delicados con Filtro
-¿Qué más querías? -preguntaría Abrazos amonestando, y no a lo Tic, fuera palabras y reclamos, cuando ve cómo pedaleo delante de ella, quien quisiera volar y anda al paso. 
Enero próximo suena lejísimos, por fortuna, que ahí quedaré, cuando menos a la vista. 
Me despido, eso hago, y entonces cuál vergüenza por los videos que Él ayudará a vestir con imágenes, mientras el Nuevo y su señito envían manjares a esta casita, protegiéndome de la pandemia. 
-Marcha entre caricias y no vítores -pienso y voy atesorándolas.
Andaré desiertos con mi amita, al modo del hermano impedido que su beduino Craig llevaba por el mundo en aquella combi hippie. 
-¿Podrás conmigo para esto y lo otro, Inesper?
-¿Cargarte, dices? N echará la mano.
-¿Y un barquito de vez en cuando? Arenas y aguas son misma cosa, quedamos. 
-Pero sin tocar ciudades.
-Nomás los muelles. Niega que son bien románticos. 
Bien engolados los demás que la cantan, jeje.