Solo el humor me salva y aquí ando de solemne.
(Para Última función, que hace años FB tiene castigado. No irá tal cual, como muchas otras notas, llamémoslas así genéricamente, de mis diez blogs.
(Urge organizar ese caos y no me deja el creciente apremio por sobrevivir. Confío hacerlo. Sino... da igual, jeje.)
¿Cuánto me tomó imaginar estos momentos? ¿Dos horas? Lo mismo que otras y otros gastaron en transportarse en su auto a solas.
No justifico así mi locura semicontrolada. ¿Hacen algo equivalente ellas y ellas, que fueron y vinieron para darse pequeños lujos y muy poco más, pues la función de su trabajo es sostener una sociedad deleznable, jeje?
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Kandinsky |
Los "niños", claro, siguen viento en popa, que la gran obra maestra son ellos. El mayor decide quedarse donde, de viaje, mis contactos le descubrieron un revolucionario proyecto técnico-científico-cultural -jeje-, emocionando también al pequeño, quien para no regresar contrito encuentra en segundos uno mexicano paralelo, concebido por este su mágico padre, jeje; de tal modo no desviará su camino como futuro físico.
SIGUE (DISCULPEN, LLEGÓ LA HORA DEL SEXO SIN IGUAL, JEJE)
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El sábado encuentro esto de Marguerite Yourcenar (https://es.scribd.com/document/473538848/Marguerite-Yourcenar-Sources-II-pdf): "Lo mejor para las turbulencias del espíritu, es aprender. Es lo único que jamás se malogra. Puedes envejecer y temblar, anatómicamente hablando; puedes velar en las noches escuchando el desorden de tus venas, puede que te falte tu único amor y puedes perder tu dinero por causa de un monstruo; puedes ver el mundo que te rodea, devastado por locos peligrosos, o saber que tu honor es pisoteado en las cloacas de los espíritus más viles. Sólo se puede hacer una cosa en tales condiciones: aprender."
¿Aprendo? El domingo voy a comer con mis crías, los nietos y algunos cercanos. Un hombre célebre por sus miserias morales y mala fe, que me debe antiguos favores, se esfuerza en ser amable pero de entrada no evita referirse a la joroba que cargo.
-Puede corregirse fácilmente -dice para paliar el comentario.
Al despedirnos hace una cosa parecida:
-¿Qué flaco estás? Come bien, chingao.
Era una parrillada y si hinqué bien el diente y llevo días haciéndolo, no oculto la delgadez extrema. Al llegar a casa mi panza se licúa por lo acumulado.
-Pecata minuta -pienso- que no impedirá asista mañana a una jornada en cuya organización contribuí, conectando entre otros a O, a quien poco antes da covid.
La joven a cargo desesperó y me ofrecí, pero despierto empeorado. Le mando un mensaje, entiende.
Tengo veinticuatro horas para estar donde debo mañana. Más que suficiente, ¿también para el alicaído ánimo?
Eterna se marchó el viernes y vuelve un año después. El enredo es mayúsculo pues ni media señal envió entretanto.
-Moriste -es mi único argumento cuando declara su infinito amor.
Vaya ricas, intrincadas horas que inician cuando yo sé y ella no, el significado de la Cumbre de Cancún, cuyos primeros, monstruosos efectos padecemos ya.
Nuestros hijos se salvarán, claro, y tengo ya para el mayor una inmejorable alternativa en Grecia, jeje, a sus diecisiete años.
Se la explico a ella, quien duda.
Bueno, regreso a la cama a seguir dirimiendo la más importante jornada entre los dos.
Por cierto, falló el transporte, que debería estar aquí hace media hora.
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No habrá tarde libre, como pensé, y así no podré dedicársela a la relación amorosa ¿que me permite seguir el consejo de doña Marguerite?
¿Entiendo algo nuevo al reandar los años noventa adulterándolos un poco, pues ya se produjo la invasión a Iraq? No cuesta trabajo seguir el periplo adolescente de mis hijos, quienes lo vivieron sin hormonas descontraladas.
La no familia donde afirmo crecieron, en términos fantásticos resultan ser barrios populares cuyo espíritu comunitario refuerza la AC internacional gracias a quien conocí a mi adorado no tormento, que me mantiene y no a ella, bióloga con posgrados en Los Ángeles y Sevilla, ciudades para las cuales construí proyectos entre chicanos, gitanos y migrantes marroquíes y del África Negra -paralelamente abrí el trabajo en ghettos musulmanes parisinos, jeje, por si Eterna prefería La Sorbona (sí, me paso de lanza, pero de eso se trata, ¿no? ((el prestigio le importa un carajo a esa argentina tan barriera como yo).
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Sin falta despierto crudo de tabaco y tonterías como ésta. Soy un tipo simpático atestado de complejos. Qué horror.
Lupita me invitó a su rancho magisterial michoacano. Puse loco de contento hasta recordar que mí único compromiso durante el mes coincide con su fecha.
Hoy parezco persona seria y hasta tantito reconocida. En las Eterna fantasías soy más genuino; ¿realmente? Allí a los diecisiete años tengo lo que encontré a mis veintitrés y duró cinco y no veintidós hasta un ahora cuya extensión anuncia durar para siempre, aunque el neoliberalismo me obligue a cambios apenas cosméticos, sin importar si ella pone en riesgo o termine nuestro intachable amor.
De hecho para este miércoles dimos un osado salto en términos pasionales, que nos confirma, con los "niños", quienes despejan el futuro y a su manera anuncian la nueva civilización cuyo sueño acaricio de carne y hueso a mis setenta y cinco.
-Estoy loco sin remedio -digo en vivo a la Tic, alterego de E, a quien entonces siento traicionar.
-Pero si al fin te permiten hacer cosas sensatas -contesta.
-Que estropearé, pues mis delirios...
Me refiero no a las desmesuras de unas horas al día a solas, sino a la vida palpable entre lxs demás.
Agosto 15
Tengo prisa y paso sólo para informar que el Menor tiene a su Carmen estilo Bizet (https://www.youtube.com/watch?v=n0hg9J5z-To), quien lo siguió a Londres, y que poco después el Mayor se hizo de Sofia Loren versión isla griega y fuimos todas y todos a su boda.
