Campanadas suena raro ¿No era mejor tañidos? Respetemos al traductor, que por una vez en su gremio lo hizo muy bien con un músico popular.
"Lejos, entre el final de la puesta
de sol y el romper de la medianoche,
nos metimos en el portal mientras tañían
estallando con estruendo
majestuosas campanas de rayos, encendían sombras
en los sonidos
parecían ser los repiques de libertad
destellando
Destellando por los guerreros cuya fuerza no es
para luchar,
destellando por los refugiados en el inerme
camino de la huida
y por cada uno de los desvalidos soldados en la
noche
y nosotros contemplamos los repiques de libertad
llameando
Observamos inesperadamente por el horno de la
derretida ciudad
con las caras ocultas, como los muros se
estrechaban,
el eco de las campanas de boda antes de la
lluvia
se disolvía en las campanas del relámpago.
Tañendo por el rebelde, tañendo por el calavera,
tañendo por el desafortunado el abandonado y el
rechazado
tañendo por el proscrito, quemándose
constantemente en la estacada
y nosotros contemplamo los repiques de libertad
llameando
A través del loco martilleo místico del bárbaro
granizo salvaje
el cielo chasqueó sus poemas en desnuda
pregunta,
el suspendido de las campanas de la iglesia
sopló a la brisa
quedando sólo las campanas del relámpago y su
trueno
golpeando por el benigno, golpeando por el
bondadoso
golpeando por los guardianes y los protectores
del espíritu
y por el desempeñado y el pintor fuera de su
época
y nosotros contemplamos los repiques de libertad
llameando
En la salvaje catedral de la atardecida la
lluvia descifró historias
para las desnudas formas sin rostro de los sin
posición
tañendo por las lenguas sin sitio adonde llevar
sus pensamientos
todas atrapadas en situaciones dadas por
supuesto
tañendo por el sordo y el ciego, tañendo por el
mudo
por la maltratada madre soltera y la mal llamada
prostituta
por el proscrito por delito menor, perseguido y
estafado en la caza
y contemplamos fijamente los repiques de
libertad llameando
Incluso un telón de blanca nube destelló en una
lejana esquina
y las hipnóticas manchas brumosas se elevaron
lentamente
la luz eléctrica todavía golpeaba como flechas,
encendida por los condenados a la inacción
o los que son retenidos en la corriente,
sonando por los buscadores, en su muda búsqueda
de pistas
por los amantes corazones solitarios,
con su historia muy personal y por cada alma
inocente
y amable inmerecidamente entre rejas
y nosotros contemplamos los repiques de libertad
llameando.
Ingenuos y sonriendo como yo recuerdo, cuando
fuimos cogidos
cazados sin huella del momento por ellas
colgamos suspendidos
mientras escuchábamos y mirábamos por última vez
hechizados y consumidos hasta el fin de su
tañido
tañendo por los sufridores cuyas heridas no
pueden ser curadas
por los incontables confundidos, acusados,
maltratados,
pisados y peores
y por cada persona ahorcada en todo el ancho
universo
y nosotros contemplamos los repiques de libertad
llameando"
Bob Dylan, 1964 en The Bootleg Series, Vol 7: No Direction Home